Por Joal Ondo 

El FC Barcelona se encuentra inmerso en negociaciones para renovar el contrato de una de sus grandes promesas: Lamine Yamal. El joven extremo, que aún no ha cumplido los 18 años —lo hará el próximo 13 de julio—, tiene contrato vigente hasta el 30 de junio de 2026. Sin embargo, su entorno ya trabaja para sellar una ampliación que refleje su creciente importancia en el equipo.

Según informó Esports COPE, los representantes del futbolista han solicitado que Yamal se convierta en el jugador mejor pagado de la plantilla. Argumentan que, por rendimiento, impacto mediático y proyección, su estatus debe reflejarse también en lo económico.

El FC Barcelona valora positivamente el papel del canterano, al que considera su mejor activo ofensivo y un pilar tanto dentro como fuera del campo. Desde el club reconocen su aportación y admiten su deseo de situarlo entre los jugadores mejor remunerados. No obstante, se han encontrado con un obstáculo: los altos salarios de Frenkie de Jong y Robert Lewandowski.

Ambos jugadores perciben actualmente entre 22 y 28 millones de euros brutos por temporada, cifras que el club cataloga como insostenibles. Estas fichas fueron acordadas en un contexto económico diferente, y la directiva considera que no deben repetirse, ya que podrían comprometer de nuevo la estabilidad financiera de la entidad.

Aunque la intención es reconocer la relevancia de Yamal en todos los niveles, el club apunta a que su ascenso salarial podría consolidarse una vez finalicen los actuales contratos de De Jong y Lewandowski, también previstos para 2026.

Así, el caso de Lamine Yamal refleja una tensión habitual en el fútbol moderno: cómo equilibrar el reconocimiento deportivo y comercial de un jugador con los límites financieros de una entidad que sigue ajustando su economía.