El espacio qué en un pasado no lejano fue testigo de ocio, diversión y turismo  —el Paseo Ngolítimo de Bata— ahora se convierte en escondrijo para delincuentes

Por Leonardo Miko Esono

El paseo Ngolítimo como lo llaman los lugareños, es uno de los espacios públicos que ha caído en el olvido por parte del gobierno turístico, debido a la ausencia de una empresa responsable de su mantenimiento y del saneamiento de sus canales de agua.

Este emblemático lugar, que en su día fue un destino habitual para el ocio y el esparcimiento de los ciudadanos, va perdiendo cada vez más su valor e imagen. Hoy en día, el Paseo Ngolitimo proyecta un aspecto decadente y genera temor entre la población, pues ha pasado a convertirse en refugio de delincuentes.

Vecinos del barrio Ngolo denuncian que el abandono del paseo ha dado lugar a una zona insegura y sucia, lo que perjudica no solo a los residentes, sino también a la imagen de la ciudad frente a los turistas. “Nosotros que vivimos junto al paseo sufrimos mucho por esta falta de mantenimiento. Allí se esconden los delincuentes; cada mañana encontramos excrementos humanos, se producen atracos y, además, las condiciones insalubres favorecen la proliferación de mosquitos, lo que nos expone constantemente al paludismo”, declaró un ciudadano afectado.

Los residentes piden al gobierno una intervención urgente para recuperar este espacio público, cuya ubicación estratégica podría convertirlo en un atractivo turístico si se acondicionara adecuadamente.